Hola amigos, muy buenas.

 Pues eso, que sigo vivo, en el camino, con mis cositas, veraniego total, con muchas cosas que contar y no tantas ganas de escribir. Bueno, os pongo una foto de la bici con sus ruedas nuevas, o, para ser exactos, con su rueda trasera nueva -de la delantera lo son solo las pegatinas- y cuento alguna cosilla, a vuelapluma:

 De entrenamientos: estoy bastante motivado, entrenando medio bien, con la ilusión puesta en el Ironman de Calella (Barcelona, para entendernos) del 4 de octubre próximo. No me agobio, no sé si llegaré a tiempo, si estaré en condiciones, pero de momento voy entrenando, a mi aire. Las semanas -12 y -11 fueron muy similares. Así cada semana hice: 2xnatación, de las cuales una sesión en piscina, 750m. y la otra en el mar, 15´una semana, 20´la siguiente + 2xcorrer (sesiones entre 24´y 40´, parando a andar de vez en cuando, cada vez menos) + 1 bici «larga» (Valencia-Denia, 90km.), completada una semana con bici «corta», 1h., y la otra con buceo en Javea, Portichol, Las Termas, bonita inmersión, por cierto. La semana siguiente, -10, atípica. Final de mes, cansancio acumulado, trabajo a tope….6 días de descanso total, sin paliativos. El séptimo…dejó de descansar. Camino de Santiago, La Gineta-La Roda, unos 20km. Ya lo contaré en otra entrada con más detalles, fantástico, con Mar y «Ron».  Semana -9, la pasada, ya de vacaciones: lunes a miercoles, Camino de Santiago, La Roda-Minaya-San Clemente-Las Pedroñeras. 60km. en los tres días. Jueves descanso, viernes natación 20´en mar + bici corta, 1h.  estrenando rueda trasera, sábado bici larga, por la mañana Valencia-Villalonga, 70km., por la tarde Villalonga-Denia, 30km. , domingo natación «larga» en el mar, 30´.  La semana -8, esta en la que nos encontramos, va de lujo: Lunes correr 38´+ natación en piscina (900m. variaditos, con algo de técnica), martes, tenis, miercoles, correr 46´+ tenis, jueves, natación (20´mar + algo de técnica en balsa de casa) + bici corta 1h.30´ light + tenis, hoy ya he nadado 17 minutillos en la playa, esta tarde haré un par de horitas de bici. mañana bici larga (sobre 4h.) y el domingo carrera a pie, 45/50´y buceo.

Del Camino, «La Gineta-La Roda-Minaya-San Clemente-Las Pedroñeras». Hemos pasado unos días inolvidables con Mar y «Ron» por tierras manchegas. Anécdotas muchas, el perro pasando por lazarillo, por perro guía en el Hotel Juanito de La Roda para que nos dejaran subirlo a la habitación, unas interminables cervezas en San Clemente con Rafael Mandigorra, un artesano tallista en madera, jubilado, al que conocimos echando unas cañas para terminar en su casa, amigos para siempre will you always be my friend…, calor, la interminable llanura manchega, buenas cenas en Hostal Antonio, tapeo de lujo en La Posada del Reloj en San Clemente, mención especial para las chuletillas de conejo a la brasa, de escándalo. Amabilidad y agradable piscina en una recomendable casa rural, en San Clemente, «Casa de los Acacio», buenos vinos, relax, campo, almuerzos en mitad del Camino, en mitad de una pinada, viñedos, cereal, girasol, tierras auténticas, buenas gentes. A lo tonto a lo tonto ya llevamos 300km. acumulados, digo, disfrutados, desde que iniciamos el Caminio en Valencia.  Un lujo.

Del Camino, por cierto, volví con 99 kilos, que se dice pronto. Hoy ya «solo» eran 96,6.

 De garitos: últimamente ha habido muchos, claro, os podeis imaginar que un mes sin escribir da para mucho. Pero me limitaré a desaconsejar encarecidamente un supuesto gran restaurante, el Tristan de Palma de Mallorca, al que me escapé con Mar para celebrar el 29 de julio pasado nuestro 15º aniversario de boda. Dos estrellas michelin, en Puerto Portals, delante mismo de los megayates de los megamillonarios, de los megafashion mafiosos, timadores y vividores varios que por allí pululan. Garito que hará las delicias de los nuevos megaricos rusos, de sus siliconadas acompañantes y demás gentola. Pero que a mi, y mira que íbamos con ilusión, no me dijo nada. Cuando pagas 700.- pavos por una cena de dos -eligiendo un champagne normalito, Bollinguer Rosé y el segundo tinto más barato de la carta, Cims de Porrerá- el servicio ha de ser algo más que fashion y estiradillo, ha de ser impecable. No puede el supuesto jefe de sala, al que acabas de pedir un Siglo III de Cohiba traer un Siglo IV y, como si tal cosa, sin decir ni media, sin justificar el cambio, sin disculparse por no tener el solicitado, como si tú fueses uno de sus vacuos clientes habituales que no se va a enterar del cambiazo ofrecerse a encendertelo, eso sí con todo el paripé del mundo. A tomar por ignorante a su señor padre, oiga Ud. Bueno, eso y más cosas, claro. La artificial «niña del champagne», que te recibe, a la que si le dices -Mar- que no te apetece champagne (debe ser que los rusos y similares si no abren la cena con champagne no están «in») no se le ocurre ofrecerte otra cosa. Ella es «la del champagne», y punto. eso sí, toda mona, con cara de saberte preguntar si deseas «un champaaaaaagggggnnnee» en perfecto alemán, algo de ruso, quizá incluso en  inglés. En castellano le viene justito. Entre tanto el supuesto jefe de sala y el supuesto sumilller (ambos tan superficiales y estirados como todo el resto) sin aparecer hasta diez minutos más tarde. Otros diez para darse cuenta de que pese a su megacarta de megavinos no tienen manzanilla (se ve que los rusos no la piden, no debe ser lo bastante chic) y otros diez para traer, como pobre alternativa, un único fino abierto ni se sabe cuándo. La comida en la linea, más buscando nombres y chorradas que algo realmente creativo. Los sabores secundarios, los acompañamientos, muy por encima de lo esencial de cada plato. Che, un garito en el que ya me han vuelto a ver el pelo a mi. Salvo que vaya invitado por un ruso de esos del petroleo, claro. Tristan, chufa.

Lo dicho, amigos, todo bien, todo en su sitio. Ah, y una semana entera, seguida, completa, ya sin probar ni una gota de alcohol. Ni una triste caña. Veremos lo que aguanto.

Ilusionados saludos.