Hola amigos, muy buenas.
En lo profesional la semana que hoy termina ha sido de lujo. Con un juicio el miercoles de esos de volverse a ver uno la grabación cada vez que esté deprimido.
En lo familiar también han ido bien las cosas, sin novedad. Afortunadamente, en eso soy un privilegiado. El jueves invitamos a los padres de Mar a comer con los nietos en un garito al que es tengo una cierta querencia, Rest. Vertical, en la última planta del Confortel Aqua, planta 13 (4+9), desde donde se disfruta de unas vistas de la ciudad de impresión. Y con un servicio y una cocina muy muy recomendables. Lo gestiona el equipo de La Sucursal, lo que siempre es una garantía. A los niños les encantó. Anda que no van a saber nada Pepe y Macarena dentro de unos años.
Añadid una comida de trabajo en Enópata Arzobispo el martes con todo el equipo del despacho, reforzado para la ocasión con un insigne perito informático (Lecter, para los amigos) y una cliente, la del referido juicio del miercoles, se suponía que para prepararlo. Menos mal que ya se le habían dedicado muchas horas antes, si hubiese tenido que salir bien por la preparación entre gintonics perfect, apañados hubiesemos ido. Más otra el miercoles para celebrar que había salido de lujo. Con la comida familiar en casa de mi madre ayer ya nos sale una perspectiva general de la semana gastronómica bastante razonable.
Y, entonces, chaval, si el curro ha ido bien y de garitos visitados no andas mal, ¿de qué te quejas?
Pues hombre, en lo deportivo es donde se podrían haber dado un poco mejor las cosas. Veamos:
Lunes: intento salir a correr, la contractura persiste, no me deja. Me limito a hacer la P.F. en el club.
Martes : voy a Correcaminos, pero nos liamos a trabajar en la organización de la Maratón de Valencia y se escapa la tarde sin correr.
Miercoles: reaparezco por la playa de la Malvarrosa, la de la foto, con Ron. 3x (7´correr+3´andar). C´est tout.
Jueves: descanso.
Viernes: descanso.
Ayer, sábado: por la mañana no fui capaz de levantarme a correr, todo el día con remordimientos, al llegar a casa por la tarde me cogí a Ron y nos bajamos a echar un trotecillo. Nada más salir, bajo la torre del reloj del puerto, para los que sabeis donde vivo, o sea, a cien metros de casa, pensando en las musarañas, el perro se me cruza y me pego una galleta fortísima. Dolor por todo el cuerpo, la muñeca derecha lesionada, no sé que será. Probablemente un esguince, según qué gestos no puedo hacer, dolor en hombro, rodilla, che, un señor tortazo. Me cogió frío, lo pasé mal. Al final completamos 50´por la playa (que incluyen tres descansitos a andar, de 3´, 4´y 3´), a duras penas, sufriendo más de la cuenta.
Hoy, domingo: me he levantado dolorido, tras pasar mala noche, a base de analgésicos y sin pegar ojo. Nos hemos bajado a la playa, a arreglar los números semanales, pero lo que no puede ser no puede ser y, además, es imposible. 3x (10´correr+ 5´ andar) es todo lo que mi cuerpo soportaba esta mañana, y aun esos con dificultad, obligándome, pasándolas putas.
Al final, entre las tres salidas de la semana habrán sido entre 15 y 20 kilómetros, no más.
Lo positivo: Un perdido no va a menos. De mi estado de forma de hoy, gordo, acabado, sin fuerza, ni fondo, ni nada, solo cabe mejorar.
Ilusionados saludos.
P.S.: Lo que sí he hecho esta semana ha sido dedicar un par de ratos a ir buscando el material para Sables, que ya va siendo hora. No he comprado nada todavía, porque soy todo dudas, pero al menos ya he ido mirando alguna cosilla.
Me voy a sentir mal si sigues así.
Hombre, entrénate un poquito porque de lo contrario, ni liebres ni leches.
Espero que el próximo post tenga otra vertiente más atlética.
Ánimos.
Ah, esta semana igual estoy por Valencia. Admito pagos a cuenta.
Saludos y KM.
ánimo Pepo, tener todo sería la leche. Unas semanas u na cosita, otras otra.. así es la vida… yo también ando bajo, lo ideal para poder subir como bien dices… aquel que se encuentra todo el día arriba, luego el golpe es más duro.
Ilusionados saludos.
Perdóname Pepo, pero en esta ocasión, salvo por lo de la torta que te has dado no he podido evitar reirme, eso de «gordo, acabado …» … me parto. ¡Mira que eres! No hay quién te corrija.
Gordo estoy seguro que no lo dices por decir, pero, hombre, lo de acabado, suena como eso que me digo yo de «mediocre», suena a risa, perdóname y gracias por hacerme reir.
Ahora de verdad espero que estés mejor, a lo mejor solamente es una fisura.
Hola amigos, muy buenas.
Hoffman, ¿pagos a cuenta, dices? Te lo dije en Enópata en su día y te lo repito hoy aquí: te voy a ganar la apuesta, no tienes ni vas a tener nada que cobrar. Tú margen de mejora es, como aquel que dice, ya inexistente. Has llegado a tu mejor estado de forma posible con cuatro meses de antelación, te has precipitado. A partir de ahora verás que por mucho que entrenes no vas a más, te entrarán las ansiedades, los agobios, subirás volumenes e intensidades «a ver si así…» y llegarán el sobreentrenamiento, el cansancio generalizado, las dudas, los problemas. Ir viendo mi espectacular progresión, mi franca mejoría, cómo mi estado de forma se va aproximando lenta pero inexorablemente al tuyo tampoco te ayudará. Te superaré, precisamente, el día «D» a la hora «H». Antes no me vale la pena.
Es más, estoy por decir que la carrera será una réplica de lo que habrá sido la preparación de uno y otro. Tú saldrás delante, a toda pastilla, escopetao. En el kilómetro 20 me dirán que me llevas media hora larga de ventaja, casi una en el 40. A partir de ahí tu margen se irá reduciendo poco a poco, de Setenil saldré ya solo quince o veinte minutos detrás. Hasta el cuartel haré los 20 kilómetros más bonitos, más pletóricos de mi vida. A falta de dos o tres kilómetros la visión de tu culete me embriagará. Me pondré a tu altura, subiré el ritmo un poquito, lo mínimo, imperceptiblemente, lo justito para disfrutar viendo como, poco a poco, te vas quedando. Haré un par de amagos de esperarte, como en plan muy colega, muy deportivo, de buen rollito, sólo para recrearme en el momento. Finalmente, cuando entremos por el campamento de la Legión me despidiré amablemente de ti y saldré hacia Ronda a un ritmo que te resultará imposible de seguir. Será tu puntilla. Ni tus piernas ni, sobre todo, tus neuronas, superarán ya ese momento. Eso sí, en meta me comprometo a esperarte para darte mi más sincera -esa sí, sincera- enhorabuena, perdedor. La merienda del domingo por la tarde, en La Tana, de Granada, esa la pago yo en todo caso. Será un placer.
Lander, como siempre un placer. Tú estando abajo estás mejor que yo cuando llego arriba.
Guille, lo de gordo, de momento y por poco tiempo, es una obviedad. «Acabado», efectivamente, es solo una forma de hablar. Ayer ya logré correr 34 minutos, con un descanso de 2´, o sea, 2 x 17´. Luego no está tan mal la cosa. Esta semana intuyo que va a ser la primera de unas cuantas buenas buenísimas.
Ilusionados saludos.
Joer, esas leches en frío, cuando se tienen más de 15 años… me ha dolido a mí.
Si las vertientes famliar, laboral y lúdica van viento en popa, lo demás da bastante igual. Y si es mejorable, pues mucho mejor.
Venga, a darle cañita, al menos, hasta que lleguen Fallas.
Saludetes.
Hola Pepo:
Te felicito, al menos el 50% del entrenamiento ya lo tienes con eso que llaman «visualizar».
Ya solo falta que te pongas las zapatillas y que salgas a entrenar; todo un reto.
Te ha faltado un pequeño detalle en tu visualización. El tiempo. Tendrás que bajar de 15 H para que eso se produzca.
Una cosa me preocupa. Vuelve vivo de Sables por favor. No quiero ganar la apuesta por incomparecencia.
Ah, y regalo por regalo de mentalismo:
Veo un tio pequeñito junto a 3 señoras, una morena, otra más morena y otra rubia,con una sonrisa de oreja a oreja espérandote (largo rato y después de un sueñito reparador) y vitoreándote en la línea de meta para felicitarte sinceramente por haber completado con más casta que preparación tu tercera llegada a la Alameda. Tras la sincera congratulación y esperando que tu rostro desencajado por el esfuerzo de más de 20 H. recupere la normalidad habitual, se descorchará una botellita de Andre Cloue como celebración y recordatorio del pequeño ágape al que tendrás que hacer frente en conmemoración de este evento. De todas maneras, hay final feliz. ¿No?
Salud y Km.
Dale una oportunidad a Ron. Sal a salir asiduamente con él y verás como ya no se cruza y te marca unos ritmos muy majos.
Tú entrenarás a rachas, no sé como irás en Sables, pero en Calella seguro que solo te veo por delante de mí.
Si me pego una leche como esa no me levanto hasta que llegue el SAMUR o su equivalente valenciano, espero que no sea mucho y te mejores.
Tengo ganas de conocer a Ron, seguro que es un perro estupendo con todos los paseos que dais.
Suerte la próxima semana y saludos a la familia, bueno va y a Lecter también.