Hola amigos, muy buenas.

 La misma cara que a la mayoría de vosotros se me ha quedado a mi esta mañana al leer la palabreja en el suplemento semanal de turno, en el típico artículo pseudo-científico. Al parecer, la procrastinación esa es un trastorno del comportamiento que consiste, para entendernos, en «dejar para mañana lo que puedes hacer hoy», posponer las tareas, aplazar las responsabilidades. Según el artículo en cuestión, estaríamos afectados el 25% de la población o, al menos, ese es el porcentaje de los que tenemos rasgos procrastinizadores.

Una de las tareas afectadas, en mi caso, venía siendo la de quitarle las telarañas a este blog. Sabed todos que sigo vivo, que sigo liadillo de trabajo, con muchas obligaciones y compromisos, en fin, más o menos como siempre.

Otra, la de ir pensando en pensar que ya va estando bien la cosa, la de parar de hacer el indio, dejar de comer y beber a discreción, cuidarme un poco, volver a la vida sana y deportiva, también la doy por comenzada, iba a decir que con éxito, pero bueno, considerando que llevo dos días, quizá sea un poco prematuro. Si pusiera aquí la lista de garitos visitados en las últimas tres semanas no sería creible, seis kilos desde que volví de Sables,   y ojo, que flaco no regresé, no, que ya eran, entonces, 93. A día del pasado viernes, 99. De ellos cuatro correspondientes a las últimas tres semanas. En fin…

El viernes fui a la picina, por primera vez desde hacía al menos seis o siete meses. No me ahogé. Conseguí hacer 4 x 100m., cutres cutres, no me había sentido tan torpe, tan mal, nunca. El primer cien todo braza, menos un largo a crol, el segundo mitad y mitad, el tercero dos largos braza, uno espalda, uno crol, el cuarto dos braza/dos crol. Ah, y necesitando para los de crol, 25 brazadas por piscina, cuando de normal bajaba de 20 con facilidad. Y eso que la piscina es de 23m., no de 25. Vaya, que el margen de mejora es acojonante.

Hoy he salido un rato en bici. Me ha alcanzado Rafa Estellés, «El Pirata», buen amigo, recien llegado del IM Lanzarote se va la semana que viene a la Quebrantahuesos. Os podeis imaginar como rueda el tío. Cómo ruedo yo no podeis, pero es lo mismo. Ha tenido la amabilidad de acompañarme cuatro o cinco kilómetros de lo más motivantes. Que, al final, haya sido 1h. 37´ es lo de menos. Lo importante es que no salía en bici desde Navidad. Estoy contento.

 Objetivos, así como los entendeis la mayoría, de momento no tengo. Llevo solo dos días en esto, he de ver como se comportan las neuronas. Pero vaya, esta mañana, en la bici, por la recta del Saler esa chula con los pinos a ambos lados hubiese apostado algo a que terminaremos desempolvando aquel precioso proyecto del Macrotri de los Parques para el fin de semana del 11 al 13 de septiembre. Y, hombre, lo de Barcelona (IM, 04.10) está pagado. A poquito que el desprocrastinador que desprocrastine mis neuronas buen desprocrastinador fuese…

 Ilusionados saludos.